Parque Talassemtane, especies unicas en el mundo
La Reserva Botánica Talassantane o Talassemtane, en el macizo de Rhomera en el Jbel Tissouka, fue establecida en 1972. Está en la zona húmeda del Mediterráneo y en invierno se pinta de blanco por la caída del agua nieve. Preserva la vegetación de seis hábitats principales: Bosques de Abetos, Bosques que mezclan Abetos y Cedros, Bosques de Pinos, de Encinas, pseudo estepa de montaña y la zona de acantilados con hundimientos y cuevas.
Este parque en las montañas del Riff fue creado para preservar las especies que crecen sólo en esta parte del mundo como el pinsapo o abeto relíctico del Terciario. Las características del terreno y las plantas lo hace un paisaje inigualable. Su orografía accidentada es un sinfín de vistas hermosas: valles encajonados y picos nevados, aldeas que parecen colgar de las laderas rodeadas de mosaicos multicolores de los cultivos, profundos acantilados alternados con llanuras aluviales y los distintos matices de los bosques.
El piso generalmente está escondido por una niebla constante apenas interrumpida por los troncos de los enormes Cedros del atlántico y Pinos negros que crecen sobre rocas calizas y contrastan en forma impresionante con el claroscuro del follaje. Existe gran cantidad de pies muertos y troncos caídos que por la humedad del suelo se cubren de musgo y líquenes y ayudan a crear una atmósfera de ensueño. Durante la primavera las peonías lo adornan con su color.
La fauna del Parque es variada gracias al ecosistema; se destacan el mono de Berbería, jabalíes, mangostas, ginetas, meloncillos y nutrias. También hay colonias de perdices morunas, liebres y conejos. Las aves son de especies migratorias: patos cercetas, becadas, palomas, codornices y tórtolas. También hay varias especies de reptiles como tortugas, camaleones y gecos entre otras.
Sus aguas son principalmente de tres ríos de los cuales el más importante es el Oued Laou, que atraviesa el parque hacia el noreste entre los desfiladeros de paredes verticales. El Oued Farda es un poco más pequeño pero su paisaje oculta un manantial, la cueva de Aïn Danou y el Puente de Dios cerca de Ouslaf. El último es Oued El Kelaa, cerca de Farada, tiene hermosas cascadas de recorrido accidentado, una vegetación diversa y varias construcciones hidráulicas como acequias, ruedas y molinos.
Es un incomparable lugar para pasar la tarde en contacto con lo más puro de la naturaleza, aprender a cuidar el medio ambiente y conocer algo más sobre las especies que habitan este maravilloso país.

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